Cataluña vive, como en otras etapas de su historia, un momento crucial. En este contexto, el decano del Col·legi d’Economistes de Catalunya Joan B. Casas y los colegiados de mérito del Col·legi d’Economistes de Catalunya Salvador Alemany, Carles A. Gasòliba, Joan Hortalà, Guillem López Casasnovas, Andreu Mas-Colell i Antoni Serra Ramoneda, a título personal, creen oportuno manifestar la siguiente opinión.

Es notorio que los hechos políticos vividos han podido erosionar las perspectivas de nuestra economía en la incipiente salida de la crisis. Esta constatación no debería hacernos olvidar que Cataluña mantiene los rasgos fundamentales que han hecho fuerte su economía. Una estructura robusta que se concreta en indicadores positivos en todo un abanico de ámbitos (inversiones, producción, exportaciones, …). El resultado de esta evolución no desaparece fácilmente y nos debe permitir superar cualquier coyuntura que sea puntualmente adversa, por lo que el análisis circunstancial de un momento determinado se debe contextualizar teniendo presente las bases estructurales que han caracterizado el dinamismo socioeconómico de Cataluña a lo largo de tiempo, de fuerte componente industrial, exportador, infraestructural y de PYME, el cual se ve corroborado por una elevada confianza depositada por los inversores internacionales. Y todo ello sin perder de vista la siempre necesaria perspectiva temporal de largo plazo y la disponibilidad de una elevada capacidad de resistencia y de adaptación del tejido social y empresarial suficientemente demostrada por Cataluña.

NP Economia catalana 191217 (EN CATALÁN)

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies